Rómulo Castro un autor de "propuesta"

Julio Montes Escala

Entrevista publicada en el periodico El Siglo

Rómulo Castro es el autor del tema ‘La Rosa de los Vientos’, que da nombre al disco con el que Rubén Baldes obtuvo el Grammy a Mejor Música Tropical en el año de 1996. Este compositor de “propuesta” fue testigo de los primeros pasos de grupos como: ‘Los Rabanes’ y ‘Son Miserables’.

¿Qué nos puede decir sobre el tipo de música al que se ha dedicado?

Bueno, en lugar de decir canción de protesta, me gustaría decir canción propuesta. Desde el punto de vista que protesta lo toman como algo negativo, es decir la negación de cosas y yo creo que el eje de lo que hacemos los canta-autores, en lugar de protestar es proponer, tomando en cuenta que mi rumbo es la motivación social no sólo por los problemas de Panamá y el mundo, también de cómo podemos solucionarlos y me parece que desde el arte podemos hacer un aporte como ciudadanos.

¿Cómo nace la idea de hacer ‘La Rosa de los Vientos’?

A principio de los años 90 yo abro junto a unos amigos un bar, que se llamó ‘El Zaguán’, el cual pasó a ser un templo de la música en vivo en la ciudad de Panamá por siete años, ahí conocí a Rubén. Cada vez que Rubén iba a ‘El Zaguán’ se subía a la tarima a tocar con nosotros y de esa improvisación fueron surgiendo proyectos que se materializaron en el disco la ‘Rosa de los Vientos’ Además, fue ese bar que le abrió la puerta a grupos como: ‘Los Rabanes’ y ‘Son Miserables’, en sus inicios.

¿Cómo es su relación con Rubén Blades?

Es compleja, fue buena, es buena y seguirá siendo buena. Mi paso por el Papa Egoro fue breve y me parece que el movimiento se echó a perder en la medida que fueron entrando ‘politiqueros’ y en vez de convertirse en una gran fuerza, fue más de lo mismo y esa experiencia quien más la sufrió fue el mismo Rubén. Sin embargo, dos canciones mías están en ‘La Rosa de los Vientos’ y luego en el año de 1999, en el disco ‘Tiempos’, tres canciones mías volvieron a estar presentes, haciendo un total de cinco. Afortunadamente, pudimos manejar los temas de amistad y de colaboración creativa más allá, de que si hubiésemos tenidos alguna diferencia en el tema político, así que la relación con Rubén es agradecimiento puro.

¿Cómo se da este movimiento de la canción de propuesta en Panamá?

Desde mucho antes de los cubanos Pablo Milanés y Silvio Rodríguez, protagonistas de la canción de autor en América Latina, ya existía algo así y eso se expresa en la música que se hacía en Panamá en los años 40, 50 y la evolución que tuvo en los años 70 con gente con una larga trayectoria en la canción de autor, como lo fue: Luis Franco, Ignacio ‘Cáncer’ Ortega, Anselmo Mantovani y la música de Rubén Blades, no sólo por lo bailable, sino por el contenido social de sus letras y así me sumé en el 77, desde entonces he recibido mucho y creo que he aportado.

¿Qué nos puede decir sobre el nuevo talento de la música de autor en Panamá y de otras partes?

En Panamá hay mucho talento y del bueno, tal es el caso de los trabajo de Yigo Sugasti, Alejandro Lagrotta, Priscila Moreno y de afuera te puedo mencionar que es sorprendente el trabajo del uruguayo Jorge Drexler, el compuso el tema de la película “Diario de Motocicleta” y con la que obtuvo un Oscar a la mejor banda sonora.