jueves, 3 de septiembre de 2009

El deber consultar lo suficiente y vivir callado


"Imagen tomada del sitio http://historiaglobalonline.files.wordpress.com/"

Julio Montes Escala

Los medios de comunicación deben tener una serie de principios laborales para hacer el trabajo en base a lineamientos éticos para un tratamiento razonable de la cuestión informativa, investigativa y de opinión.


Muchas de estas medidas tomadas en cuenta para un mejor periodismo están orientadas para que los poderes políticos y estatales no afecten la labor de cada periodista.


En la película que estamos tratando en este trabajo, vemos como cada uno de los dos periodistas se preocupa en consultar la mayor cantidad de fuentes, para controlar el hecho.


Acudieron a muchos lugares corriéndose riesgos, como las tiraderas de puerta, el seguimiento por parte de los agentes del poder político de lo Estados Unidos. Esto representa la independencia que debe haber en este trabajo, en relación al poder venga de donde venga.


Sobre esto otro aspecto para ser tomado en cuenta es la garantía dada por cada uno de estos reporteros con los consultados a medida que la investigación se iba desarrollando, pues sus nombres no fueron publicados en las notas.


Toda esta serie de asuntos relacionados a la conducta ética en un trabajo se le denomina deontología y a pesar de que no es mencionada algo con tal. En la conducta de los protagonistas se ven una serie de caracteres con una sólida estructura en una mirada ética y con responsabilidad profesional.


Sobre este asunto hay que tener algo muy claro la deontología profesional esta basada en la colectividad de un grupo o una asociación de profesionales de una rama específica. Veamos, la ética profesional esta en la persona, lo cual es reflejado por medio de su conducta ante un acto X ó Y.


Señala el autor español Hugo Aznar sobre el tema de los deberes profesionales: la ética y la deontología tienen como tarea reflexionar sobre la dimensión moral de una determinada profesión o actividad social, contribuyendo a precisar sus obligaciones, sus bienes y sus valores. Pero como tal, carecen de prácticas más allá del compromiso personal que puedan suscitar en la conciencia de lo profesionales”.


A lo largo de esta película vemos como se hace una investigación con mucha dedicación, incluso un jefe algo desafiando con el trabajo que se estaba realizando, por considerarlo, algo de poco interés para la población. Pero el no tenia la menor idea de que estaría por venir.


Ese jefe fue Ben Barlee, quien fue director del Washington Post, sobre este tema en sus libros de memorias, dice lo siguiente sobre este caso:


“Ninguno de nosotros, y menos aún Woodward o Benstein, tenía aún la mas remota idea del impacto del Watergate iba tener en el periodismo. Los propios Woodward y Bertein iban a convertirse en héroes de culto dentro de los anales del periodismo; lo siguen siendo”.


En este roce entre el ejecutivo del país más poderoso del mundo y el periodismo representado por los periodistas del Washington Post se dieron muchas declaraciones por parte de los adllegados, al Presidente Nixon. Mencionamos la siguiente hecha por Bob Dole, presidente del Comité Nacional Republicano.


“El Washington Post es el único, que deliberadamente, mezcla episodios ilegales y faltos de ética, como el Watergate, con acciones que siempre han sido parte del oficio de los políticos desde el mismo que día entré a esta profesión”.


Debemos mencionar que el señor Dole tenía muchos motivos para sentir que esto era parte del juego político, debido a las creencias políticas de Ben Bradlee, quien era simpatizante de los Kennedy. Añadimos lo siguiente que también forma de las declaraciones de Dole: “Sin ninguna duda, el señor Barlee, un viejo “siervo” de Kennedy, tiene derecho a tener sus propias opiniones, Pero cuando permite que su periódico sea utilizado como instrumento político de la campaña de McGovern, cuando el mismo viaje por todo el país como pequeño sucedáneo de McGrovern, entonces él y su publicación deben esperar ser tratados en consonancia, y su momento así lo serán” .


Claro que lo anterior es mas escudo que otra cosa, pues y de acuerdo a la película de Pakula, en todo momento Bradlee presto, desconfianza por tal motivo que no fue una hazaña política, en lo absoluto.


En este escándalo estuvieron involucrados muchas personas allegadas al gobierno de los Estados Unidos. Esto no fue impedimento para que los reporteros lograr hace su trabajo. Esto demuestra la independencia y el compromiso profesional, que debe tener el obrero de la información ante los “molinos de viento”.


El periodista siempre debe tener presente el tema de la reserva de su fuente como un compromiso con el mismo y la persona que le de la información, requerida quien es la que le esta confiando algo.


Este tema a pesar que no forma parte de la película es un tópico que a generado mucho debate y conflicto entre el estado y el mundo periodístico, pues el periodista no esta dentro de la situación en la que se encuentra el sacerdote con su feligrés o el medico con su paciente.


Para el periodista más que hacer algo que diga alguna norma o ley es algo que va con la moral y la conciencia, es que te den algo para que lo cuides y lo guardes, como todo aquello que se entierra, para que el suelo lo proteja enternamente.


El termino deontología fue utilizado por primera vez por el filosofo ingles Jeremias Bentham en su obra Deontología de la ciencia y la moral. Este termino se aplica a las conductas morales del hombre, es decir lo que no esta dentro de las hipótesis de la legislación y que corresponden al campo laboral de una organización y su respetivo comportamiento con los asuntos en el ejercicio profesional de cada trabajador.


Toda persona debe saber como obrar dentro de su terreno en el cual trabaja, ya que muchas veces esto no depende tanto de una empresa determinada. Es simplemente la moral de cada sujeto, que lo hace hacer cosas y fruto de esto a tener los resultados esperados.


Así que es importante saber que rumbo llevar en nuestro recorrido. La película asignada solo recoge algunos pasos que los periodistas debe seguir en su jornada del día a día.


En ningún momento estos reporteros dejaron de lado su investigación. Fue un trabajo en la mirada puesta en todas partes para reforzar el trabajo que se estaba realizando, en todo momento hubo pasión y por ningún motivo flaquearon, esto indispensable para cada reportero.


Los medios deben ser la ventana del espacio democrático, que no es solamente hacer elecciones y dejarlo ahí. Esto también es verificar aquellas lesiones causadas a la cuestión nacional por parte de los diversos sectores del país. Es ahí donde el medio no debe tener ser un punto y parte de las esferas de las del poder.


Es precisamente el periodismo la voz de alerta para dar a conocer los corruptos que hacen sus actos faltos de sensibilidad humana, a espaldas de quienes creen en las autoridades.


En este caso se descubrió a un presidente que sabía de todo aquello que acontecía, a pesar de que lo negó en un principio, terminó aceptándolo en base la verdad sacada a lo visible por parte de las investigaciones serias a profundidad con el compromiso de informar y no de vender ni crear chismes ni hacer noticias de poca monta para una sociedad pensante.


El periodismo debe ser un instrumento para combatir las injusticias, los callejones oscuros. Pero esto no se nota mucho, pues en estos tiempos muchos medios


están en manos de los grupos poderosos económicamente. Lo que hemos mencionado a lo que va de este trabajo; debe servir como punta de la lanza para apartar el oficio periodístico de practicas monopolistas y de plataforma política de grupos poderos de una sociedad.


En este sentido el investigador mexicano Enrique Sánchez Ruiz en su obra Medios de comunicación y democracia apunta lo siguiente: “Los modernos medios de comunicación son, o forman parte de grandes empresas. Es decir, se trata de organizaciones complejas, usualmente regidas por el imperio del lucro y la ganancia. Hay otros tipos de motivación para establecer una organización mediática, pero el entorno capitalista y la-mucha o poca-competencia suelen hoy en día ser determinantes para que las utilidades sean el motor de últimas instancia”.


El hecho de que grupos con poder económico tengan espacio publicitario en un medio masivo, a sido para muchos un detonante para que la crítica a algunos problemas quede nula. En Panamá tenemos el caso del profesor Agustin Del Rosario, a quien se le cerró su columna en la revista Siete. Sobre esto el autor al que hemos hecho referencia señala:


“Las organizaciones mediáticas, en tanto actores sociopolíticos, con otros polos detentadores de poder, principalmente el poder político. Hemos de tener en cuenta que este panorama se complica cuando reconocemos que los medios de difusión contemporáneos operan en medio de un entorno que ya no se detiene dentro de los límites del Estado-nación, de modo que suelen ser parte o de estar articulados con fuerzas principales del proceso de globalización, es decir, los conglomerados trasnacionales, que no son solamente mediáticos, sino altamente diversificados de intereses económicos y, también, políticos”.


Con esto no queremos salirnos del tema pero a pesar de que cuando es una realidad que tenemos frente a nosotros en el mundo de hoy y en lugar de hacer criticas, cuando un núcleo de estos falla de alguna manera se aplica a la censura o se calla al que lo hace. Es parte de este trabajo decir que cada medio y cada periodista tiene un compromiso con la verdad y no debe estar bajo la mesa de los grupos de poder de tal manera que la independencia debe siempre ser una de las tantas caracterices del comunicador, ante este un caso cada obrero de la palabra escrita o hablada debe tener dignidad y ejercer presión desde la pista de la opinión pública.



Los periodistas somos agentes de cambio, esto es algo similar a lo que han hecho muchos lideres como: Tomas Moro, José Martí, y en Panamá periodistas como Joaquin Beleño y Guillermo Sánchez Borbón que desde sus escritos, denunciaron muchas irregularidades del sistema y sus actores.


El periodista panameño Eduardo Soto sub-director del periódico El Panamá América, nos dice: “la experiencia critca del Watergate en los Estados Unidos, que impuso la tendencia del periodismo profundo que cambia los destinos de un país”. Todo trabajador debe tener un ángulo moral para hacer sus obras y creaciones, esto debe incluir el trato que se a da las personas con las que trabajamos o trabajan a diario los periodistas. Cada uno de los periodistas de esta historia tenían un manejo indiscutible con cada entrevistado y un respeto para evitar que la fuente se sienta presionada, esto es darle espacio a quien te da una pequeña porción de tiempo para aquello que se esta buscando.


El periodista debe emanar confianza con quines lo escuchan, le leen y con las personas que le dicen datos, para ser publicados y no decir una cosa y hacer otra. Incluso hay que ser como una tumba, ante una autoridad judicial porque ese es el sentido del secreto profesional, de hacerlo sería traicionar a quien confío en el reportero.


Muchos hoy en día no se toman tan en serio estos puntos, eso es muy lastimoso. No hacer las cosas con la suma necesaria de responsabilidad, ya que esto nos puede llevar a hacer periodismo sin poco tacto humano y con una mentalidad de luces cortas ante los que se nos puede avecinar si no guardamos lo que debemos guardar y eso es darle una puñalada por la espalda a quine nos dio la absoluta confianza de contarnos lo de interés social.


Tampoco no hay que ser una máquina de la venta y sí hay que serlo en el ámbito de la investigación sería de ojos abiertos, pues eso es educar a los demás, que están a la espera de todo aquello que se arma en las redacciones de los informativos.


Este caso es un gran ejemplo de constante búsqueda, de trabajo arduo y de un asunto serio en cuanto a las bajezas de los poderosos. Que en muchos de nuestros países han tomad estos espacios para dar a conocer todo a medias. He ahí la decepción de muchos grupos de la prensa de la actualidad. Esto es ponerle la otra bisagra al aparato de la democracia, señalar el ruido y hacerlo con iluminación y con sentido común de ciudadanos de una determinada sociedad para que las cosas jamás pierdan su sonoridad.



Cabe destacar el papel de Mark Felt, quien a nuestro pensar comenzó a limpiar la casa, esto a pesar que sentía algo de pena con su familia por las medidas tomadas para dar a conocer aquellas “toallas sucias”, para muchos este es un héroe por decir lo oculto para que del reportero que tiene una tribuna pública de su lado, se encargue de dar a conocer a la población el hecho.


Otro merito fue no haber traicionado a los periodistas con los que había estado colaborando, es aquí donde entra la grandeza de este personaje quien se le conoció como “Garganta Profunda”. Este apodo fue bautizado por el director adjunto del Washington Post Howard Simons. Se le considero “Profunda” por ser una fuente “profundamente secreta”; de acuerdo con Bob Woodward y por una película porno de momento, en aquel entonces cuya protagonista fue Linda Lovelace.


Con esta investigación se dio a conocer los siguiente, señalado en el libro de memorias “La vida de un periodistas” de Ben Bralee:


1. Transcripciones de cintas con más de 4.000 horas de conversación implicando a los personajes clave: Richard Nixon, John Mitchel, Heldelman, John Ehrkichman, Jonh Dean, Charles Colson.


2. Los voluminosos expedientes de las visitas celebrdas por el impresionante Comité de Selección del Senado de las Actividades de la Campaña Presidencial, conocido como Comité Watergate del Senado o el Comité Ervin, por su presidente Sam Ervin, el pintoresco demócrata de Carolina del Norte. Ochenta y tres días de testimonio (la mayoría televisado) de treinta y tres testigos.


3. Los expedientes de la visitas del Comité Judicial de la Cámara de Representantes durante la reacusación del presidente.


4. Los expedientes de todos los juicios celebrados, que terminaron en cuarenta con declaraciones de culpabilidad o condena.






En cada nota hay un mar de vida